Soda Stereo, una de las bandas más icónicas del rock latinoamericano, tiene un lugar especial en la historia del Festival de Viña del Mar. Su debut en el escenario de la Quinta Vergara ocurrió en 1987, en pleno auge de su carrera y en el contexto del lanzamiento de su exitoso álbum Signos. Con una energía arrolladora y un repertorio lleno de éxitos como “Persiana Americana” y “Prófugos”, la banda encabezada por Gustavo Cerati marcó un antes y un después en la historia del festival, consolidando la presencia del rock en un evento tradicionalmente dominado por la música popular y romántica. El rock latinoamericano había llegado para quedarse.
La presentación de Soda Stereo en Viña 1987 no solo conquistó al público chileno, sino que también ayudó a consolidar su influencia en toda América Latina. Su actuación estuvo marcada por la presencia escénica de Cerati, la destreza de Zeta Bosio y Charly Alberti, y un carisma que dejó una huella imborrable en Viña. El público de la Quinta Vergara respondió con una indiscutida ovación, posicionando a Soda Stereo como un fenómeno musical que trascendía fronteras y géneros.
Aunque su paso por el festival se limitó a esa emblemática actuación, el legado de Soda Stereo sigue vivo en la memoria colectiva del evento. El año 2009, Gustavo Cerati participó como solista, instancia en la cual tocó 3 canciones de la histórica agrupación argentina, aparte de sus éxitos en solitario, cautivando nuevamente a su fanaticada.
A continuación, les dejamos lo que fue la participación de esta mágica banda el año 87′, con unos peinados y outfits dignos del baúl de los recuerdos:
